Siempre que hablamos de la extracción de leche materna con sacaleches damos por sentado que va a ser de lo más fácil. Pensamos que todo es cuestión de ponerse el sacaleches y esperar a que la leche fluya a borbotones. Y en algunos casos es así, pero en otros la tarea de sacarse leche puede resultar titánica y frustrante.

Respondemos hoy a las preguntas más habituales sobre el tema, para resolver todas las dudas.

¡Es que nunca me he sacado nada!

La relación con el sacaleches suele ser una relación de amor/odio para muchas madres. Y es que para conseguir sacarse leche con el sacaleches hay que tener en cuenta muchas cosas.

La primera es que un sacaleches no es un bebé.

Para los bebés es muy fácil generar una subida de leche y conseguir toda la leche que necesitan pero el sacaleches hace justo lo que su nombre indica: sacar la leche.

Es decir, si el pecho está lleno de leche el sacaleches va a sacar con bastante facilidad esa leche acumulada. Normalmente la dificultad suele ser conseguir crear un reflejo de eyección y crear leche para el sacaleches.

También tenemos que saber que hay distintas marcas de sacaleches y no todas tienen la misma efectividad.

Si lo comparas con las diferentes marcas de coches lo vas a entender con más facilidad: primero están las preferencias personales sobre una marca y, en segundo lugar, la eficacia de cada marca. Y es que todos los coches tienen ruedas pero no con todos te puedes ir de safari.

Además, hay que tener presente que hay que asegurarse que la talla del embudo del sacaleches es la adecuada, ya que suele ser habitual que este simple hecho no te ayude a conseguir extraer leche.

¡Pero tengo el mejor sacaleches y sigo sin sacar casi nada!

Si ya has revisado la talla del embudo y te has asegurado de que la que tienes es la adecuada. Entonces, puedes conseguir extraer un poco más de leche gracias a diferentes técnicas y trucos que pueden ayudarte: 

• Ponte cómoda, en un espacio conocido y relajado.
• Estimula el pecho antes de la extracción con un masaje por todo el pecho, para estimular la salida de la leche.
• Sácate leche a la vez que das el otro pecho al bebé o usa un sacaleches doble para aumentar el reflejo de eyección de la leche.
• Si el bebé no está contigo, ten cositas suyas a la vista como una foto o huele su ropita. Seguro que te ha pasado que estás por la calle, un bebé llora y has tenido una pequeña eyección de leche.

Quizá te interese ampliar este tema con el artículo del blog de LactApp sobre 10 trucos para extraer más leche con sacaleches.

Por otro lado, debes saber que los primeros meses de vida, hasta los 3 aproximadamente, sacarse leche es muy fácil pero llegados a este punto el pecho regula muy bien la producción y es complicado extraer ese extra que antes se extraía con cierta facilidad.

Para entendernos, una vez damos a luz el pecho produce mucha leche y la deja a disposición del bebé para que vaya tomando. Pero más o menos a partir del tercer mes, el pecho comienza a regular la producción para poder generar solamente la leche que el bebé necesita.

El hecho de que se regule es muy positivo para la lactancia, porque se nos dejan de hinchar tanto los pechos cuando el bebé no mama y ya no tenemos tantos “escapes” de leche. Pero también es cierto que esto hace que no sea tan sencillo extraer leche con el sacaleches y esto puede ser frustrante.

¿Si me saco 50ml entre los dos pechos esta es la leche que tengo?

No. El sacaleches nunca nos puede servir para valorar qué cantidad de leche tenemos. Es muy habitual que las madre se asusten cuando empiezan a usarlos y observan cómo sale poquita leche.

El sacaleches no mide nada. No te asustes si sacas muy poco o incluso nada. Si tu bebé está creciendo, él te demuestra que tienes la leche que necesita.

Antes en el trabajo me sacaba más leche y ahora nada de nada ¿por qué?

La estimulación con sacaleches tiene esta contrapartida. Al ser la estimulación menor, el cuerpo no entiende qué debe hacer y suele suceder que de la noche q la mañana la extracción de leche cae en picado sin aviso previo.

No eres tú, es él. Es el sacaleches que nunca es tan eficaz como un bebé.

Si te sacas leche en el trabajo para ofrecérsela al bebé al día siguiente, puedes intentar aumentar el número de extracciones, aunque sea menos rato. Si te sacas leche para mantener la producción, entonces no te preocupes que cuando estés con tu bebé a la teta, si le dejas mamar lo que te pide, él podrá tomar toda la leche que necesita y será capaz de mantener la producción adecuada.

Si estoy mucho rato, ¿sacaré más leche?

Para conseguir activar la extracción con el sacaleches es mejor que te saques leche poco rato varias veces al día. Es mucho más efectivo que sacarse leche 1 hora 1 sola vez al día.

Como dice el dicho “divide y vencerás”, y es que es mucho más eficaz realizar extracciones cortas y frecuentes que una única extracción infinita.

Cuando veas que de un pecho salen gotitas de leche, pasa al siguiente. Y de nuevo vuelve al primero cuando veas que sale despacio. Termina con un masaje manual para extraer la mayor cantidad de leche.

Me saco después de darle el pecho y no saco nada

Si sacas leche cuando el bebé ha tomado gran parte de la leche es posible que saques poca.

Puedes sacar leche en cualquier momento y no temas por dejar al bebé sin alimento y es que ellos en escasos 2 minutos pueden producir una subida de leche y conseguir toda la leche necesaria*.

Así pues, y a fin de ganar confianza en ti misma y en tu bebé, puedes extraer leche del pecho contrario al que le has dado al bebé o puedes esperar a una hora después de amamantar para realizar las extracciones.

*Sólo en el caso de que el bebé tenga una succión débil o inmadura se desaconseja sacarse leche antes de que él haya mamando.