El duelo de lactancia puede producirse cuando una madre ha deseado, e incluso se ha preparado, para poder alimentar a su bebé con lactancia materna y, por circunstancias, no se logra. Es frecuente que se experimenten emociones muy intensas. La experiencia de la maternidad está cargada de renuncias que implican múltiples procesos emocionales que se pueden catalogar como duelos. Aunque siempre se trata de procesos emocionales naturales y normales, lo más saludable para la persona que lo experimenta es sentirse acompañada y sostenida por su entorno, también por los profesionales sanitarios que la atienden.

Los procesos de duelo son frecuentes en todas aquellas situaciones de la vida cotidiana en las que tiene lugar una pérdida. Tenemos asociado el duelo a muerte, sin embargo, el proceso de duelo puede experimentarse en vivencias de la vida cotidiana como puede ser una ruptura de pareja, la pérdida de una oportunidad laboral o de un logro ilusionante. En muchas ocasiones, un acompañamiento profesional favorece el abordaje, la elaboración y experiencia del proceso natural de duelo.

La experiencia de duelo es personal, por lo que es fundamental individualizar todos los casos. Los procesos de duelo no se hacen bien ni mal, los procesos de duelo se van elaborando. El objetivo de “superar un duelo” pierde sentido entendiendo que son experiencias vitales que quedan registradas como recuerdos, por lo que es normal que sean evocadas en el relato de las personas en su experiencia vital.

La diferencia entre un duelo elaborado o procesado y otro que no lo está, es la forma en la que nos podemos relacionar con ello, es decir, el modo en que podemos sostener las emociones que provocan, de forma natural, los recuerdos de experiencias que nos han resultado dolorosas. 

Tener un conocimiento básico del funcionamiento de los procesos de duelo es fundamental en el acompañamiento de situaciones de lactancia materna deseada pero fallida. Solo así podremos ofrecer un espacio respetuoso con la vivencia de la madre, que se aleja de juicios, opiniones y mandatos culturales tradicionales que trasladan un mensaje de urgencia a las madres sobre “superar”, incluso olvidar, lo que están sintiendo.

En el abordaje de lactancias maternas fallidas es importante no solo acompañar en la elaboración emocional del duelo, también es fundamental ayudar a crear conexión emocional en el establecimiento de una lactancia artificial. Aunque a priori, se puede percibir como algo incompatible, en los procesos emocionales conviven múltiples emociones de forma simultánea.

Así, las profesionales tenemos una labor fundamental a la hora de dar espacio a la ambivalencia emocional, apoyando y acompañando a la madre en la elaboración del duelo y en la creación de una lactancia artificial como ella sienta más respetuosa con su bebé y con su sistema familiar. Ofreciendo estos espacios, será la propia madre la que podrá ir elaborando la forma de proceder y encontrando, de forma paulatina, modos, momentos y disfrute con su bebé independientemente de la forma de alimentación.

Noelia Extremera

Psicológa perinatal experta en duelo de LactApp