Si tienes un bebé, puede que te preguntes, ¿afecta el cambio de hora a la lactancia? Tanto adultos como criaturas nos podemos ver afectados por estos cambios, que suelen notar especialmente los más pequeños (y, en consecuencia, sus madres y padres). La adaptación puede costar algo más cuando en casa hay unas rutinas horarias muy marcadas, aunque los efectos del cambio de hora en la lactancia suelen resolverse en los siguientes días sin mayor repercusión.

¿Qué podemos esperar mientras nos adaptamos al nuevo horario?

Cambiar el ritmo habitual, aunque solo se trate de una hora, puede causar irritabilidad y somnolencia, por ejemplo en la conocida como hora bruja. Si tu bebé se alimenta de leche materna, puede traducirse en una mayor demanda puntual. Como ya puedes haber notado, cualquier cambio que les genere algo de malestar puede asociarse a una mayor demanda de pecho, ya que les aporta tranquilidad y seguridad. 

¿Es necesario prepararse para el cambio de hora?

En general no, ya que, como decíamos, las criaturas suelen adaptarse sin demasiados problemas. Pero si vuestro día a día tiene unos horarios muy marcados y quieres ir preparando el nuevo horario puedes ir adelantando las rutinas diez minutos cada día, especialmente las horas de las siestas y de acostarse por la noche.