Lactancia materna y Síndrome de Down
Hoy es el Día Mundial del Síndrome de Down, así que no podemos dejar de dedicar una entrada a las madres y los bebés que quieren mamar. No hay razón para descartar la lactancia ante el diagnóstico, porque, si bien es cierto que estos bebés pueden tener algunas dificultades extras para mamar van a necesitar la misma ayuda y apoyo que en la lactancia de cualquier otro bebé.
Como madre, en estos momentos es posible que tengas muchas dudas y miedos acerca de cómo vas a alimentar a tu bebé, pero recuerda que aunque ahora te parezca imposible, en breve vas a ser una experta en lo referente a su alimentación. Para todos los bebés la lactancia materna es importante pero para tu hijo es un tesoro.
Te vamos a ofrecer claves para que conozcas ciertas características de la patología de tu bebé que pueden afectar la lactancia, e ideas para superar las dificultades que pueden surgir.
- Si tu bebé nace con un buen resultado del test Apgar y sin patologías relacionadas, debería ser puesto encima de tu pecho lo antes posible como cualquier otro bebé.
- Permite que explore y busque el pecho, quizá va a necesitar un poco de ayuda para encontrarlo, pero deja que te sorprenda y disfruta de estos momentos.
- Si os han tenido que separar, no dudes en empezar a estimular el pecho y a sacarte calostro en las 8 horas posteriores al parto.
- Cuando os encontréis en la habitación, empieza a practicar piel con piel de manera inmediata.
- Si tu bebé se agarra, ¡perfecto! Deja que succione y mantén un ritmo de tomas para asegurar la ingesta de leche. Estos bebés tiene tendencia a estar más dormidos y necesitan que marques los horarios de las tomas.
- Si tu bebé no es capaz de agarrarse, inténtalo con pezoneras. Una pezonera puede aumentar el estimulo que recibe y le puede facilitar tanto el agarre como la succión.
- Si las pezoneras no funcionan, ten paciencia, no siempre es fácil, dale tiempo y seguid intentándolo.
- Si no se agarra y para asegurarte que no baja demasiado de peso, te debes extraer leche y ofrecérsela con métodos de suplementación. El método jeringa-dedo es el más adecuado en este caso ya que es el único método que entra su lengua, que la mantiene en una postura muy similar a la que debe realizar para mamar.
- Si mama, controla las tomas hasta que recupere el peso del nacimiento.
- Si se muestra poco activo al mamar, puedes realizar la técnica de compresión mamaria mientras está agarrado al pecho para ayudarle lo máximo posible.
- Recuerda que para evaluar el crecimiento de los bebés con Síndrome de Down se usan unas tablas (percentiles) distintos, ya que al inicio su crecimiento puede ser más lento.
- Y no dudes con contactar con las asociaciones de padres y familiares. Ellos serán vuestro mejor apoyo y fuente de ideas, recursos e información.
Os dejamos algunas sugerencias que os pueden ser de utilidad.