Hoy hablamos de laringomalacia a raíz de esta consulta:

“Mi bebé de un mes hace mucho ruido cuando mama, es como si tuviera un silbido en el cuello. Él gana peso y todo parece ir bien pero ese ruido me parece raro y no sé qué es. ¿Me podéis ayudar?”

Los bebés cuando mama suelen hacer bastante ruido. La mayoría están relacionados con la lengua y con la deglución de la leche. En ocasiones, el ruido se sitúa fuera de la cavidad oral y lo escuchamos un poco más “abajo”, en la zona del cuello. Cuando la zona en la que notas el ruido es el cuello, hablamos de laringomalacia. 

¿Qué es la laringomalacia?

Es una anomalía congénita situada en la zona de la laringe, que suele manifestarse con un ruido estridente, como un silbato cuando el bebé mama, llora o está boca abajo. 

¿Qué es la laringe?

Antes de seguir, vamos a hacer una pequeña clase de anatomía. La laringe forma parte del  aparato respiratorio y se sitúa entre la faringe y la tráquea. Es una estructura localizada en el cuello. Para que lo notes de forma más fácil, si te tocas el cuello, busca la zona dura (la nuez): esto es la laringe. Esta estructura está formada por anillos de cartílago que le dan robustez. Además, en la parte superior encontramos otra estructura, llamada epiglotis. La epiglotis actúa como un puente levadizo que evita que cualquier objeto pueda llegar a la vía aérea. En los casos que se produzca una laringomalacia, la epiglotis también está un poco más blanda de lo habitual y colapsa cuando el bebé inspira. Por tanto, hay diferentes tipos de laringomalacia según donde se sitúa dentro de la laringe. 

Pero, ¿qué pasa si la estructura de anillos de cartílago no es tan dura como debería ser?

Es en ese caso cuando hablamos de laringomalacia.  La laringomalacia es congénita y se produce porque la parte superior de la laringe está flácida o blanda, los anillos de cartílago no se han endurecido. Cuando el bebé mama, el aire pasa por la laringe y se colapsa en algún punto, según esté afectada una u otra zona. 

¿La laringe de un niño y un adulto es diferente?

Las laringes de los recién nacidos y los niños pequeños tienen una posición más alta que las de os adultos. Eso les permite poder mamar con más facilidad. Durante los tres primeros años de vida crece muy rápido. Gracias a ese crecimiento se pueden realizar los movimientos adecuados con las cuerdas vocales que posteriormente permiten hablar.  

¿La laringomalacia es grave?

Suele ser una situación benigna que afecta a bastantes recién nacidos. En la mayoría de casos solo es una situación muy escandalosa que no afecta en nada al bebé. 

¿Tenemos que hacer algo para que desaparezca?

En la mayoría de los casos desaparece sin tratamiento. Entre los 12 meses y los 18 meses se suele endurecer definitivamente el cartílago o la epiglotis y el estridor desaparecer. Solo en casos graves es necesario realizar otro tipo de tratamientos.