¿Existen soluciones mágicas para las grietas en el pezón?
Muy a menudo nos pedís información sobre diferentes remedios, más o menos acertados para curar las grietas. Recordad que siempre que tengáis dolor o grietas es muy importante revisar la técnica: la posición y la postura, valorar el agarre del bebé y las posibles dificultades orales. Y es que, si no buscamos el origen de las grietas, es complicado que por sí mismas se solucionen y vayan a mejor.
Hoy tenemos para vosotras un videopost con Laia Aguilar, matrona en LactApp, que nos explicará qué productos relacionados con las grietas existen:
Por otra parte existen remedios caseros para las grietas entre los que hay de todo, algunos son inocuos y otros pueden ser peligrosos para el bebé:
Emplastos de zanahorias
La recomendación es rallar zanahoria y aplicar en forma de emplasto sobre el pezón dañado. Suponemos que este remedio proviene de que la las zanahorias, a parte de contener mucha vitamina A, también contiene vitamina E que tiene efectos positivos sobre el estado de la piel. Pero de ahí a curar heridas en el pezón hay un mundo.
Miel
La miel se usa para curar heridas y quemaduras. Nada nuevo, a pesar de que la evidencia científica no tiene claro que sea mejor que otros tratamientos el uso en los pezones se debería evitar a toda costa.
Los bebés menores de un año no deberían consumir miel, dado que puede contener toxina botulínica que puede poner en riesgo la salud del bebé.
Aloe vera
El aloe vera tiene múltiples propiedades positivas para la piel: es astringente, hidrata, se cree que tiene la capacidad de regenerar los tejidos… Pero el aloe vera también es usado tradicionalmente para destetar, y es que su sabor es tan amargo que cuando ofreces el pecho al bebé después de haberlo aplicado lo puede rechazar. Y el sabor es tan potente que no desaparece con facilidad.
Membrana de huevo
Se usa la membrana interior de la cáscara de los huevos para curar o proteger heridas y quemaduras. No he sido capaz de encontrar ningún tipo de evidencia sobre la eficacia de este método. Lo que sí tenemos que tener claro es que la aplicación sobre la piel puede dejar restos de proteína de huevo sobre las heridas y en el caso de que el bebé sea alérgico podría ser una acción peligrosa.
Así que como podéis ver, no existe el remedio milagroso para las grietas, nuestra recomendación es, después de hallar y corregir la causa de las mismas, procurar mantener la zona limpia, seca y bien aireada, y como complemento podéis utilizar los productos que os recomendamos en el vídeo.