A raíz de la pandemia provocada por el COVID-19, hay muchas familias alrededor del mundo que están o han estado confinadas en sus casas con sus hijos lactantes.

Nunca antes habíamos vivido algo así. Es la primera vez que nos enfrentamos a una situación como esta y son muchas las dudas que aparecen. Lo que os podemos decir es que son muchas las familias viviendo esta situación. Por eso vamos a intentar dar respuesta a algunas de las preguntas que nos hacéis de manera frecuente:

Si mi bebé nota mi tensión ¿eso puede hacerle daño o estropear la leche?

Los bebé sí notan nuestra tensión, de la misma manera que la nota cualquier otro adulto que esté con nosotras. Los bebés suelen ser reactivos ante las emociones que mostramos. Si estamos tensas, están pendientes de nosotras, es pura supervivencia.

¡Es natural que estemos tensas o preocupadas ante esta situación! Es imposible no estarlo, pero lo que debes saber es que no, el estrés que puedas estar experimentando no estropea la leche, ni la pone mala y tampoco hace que sea peligrosa para tu bebé.

Estoy muy estresada, ¿me voy a quedar sin leche?

La leche no desaparece por el estrés. Sé que muchas tenéis la sensación de tener menos leche y esto, por supuesto, os preocupa mucho. La leche no disminuye por el estrés, el volumen va a ser el mismo. Lo que sí puede ser más complicado es la eyección de leche. Cuando nos ponemos muy nerviosas la oxitocina, que es la hormona que se encarga de mandar la leche hacia el pezón, puede funcionar con más lentitud. No implica por tanto que no tengas leche, solo que puede costar un poco más que salga.

Por ello es importante buscar momentos de relajación: escuchar música que te guste, de esa que te hace saltar o te pone la piel de gallina, ver una serie que te relaje mientras tienes a tu bebé a la teta, hacer yoga 10 minutos, abrazar a tu bebé o a alguien a quien puedas abrazar, disfrutar de una comida rica… y la leche fluirá con más facilidad.

Mi bebé está más demandante

Tenga la edad que tenga, tu bebé puede estar más reactivo a todo. Y es que nosotras también estamos más reactivas. Todas estamos pendientes de las noticias, de lo que pasa, no hablamos de otra cosa… y esta tensión también la perciben nuestros hijos.  Es normal, por tanto, que estén más demandantes. Y si además tu bebé es mayor es probable que se aburra, que no entienda por qué no puede salir de casa e ir al parque, que no entienda qué pasa ni qué nos pasa a los adultos… y la manera de estar más tranquilo puede ser no dejar la teta.

Mi hijo es mayor y se pasa el día en la teta

¡Tener a mamá encerrada en casa y con la teta lista es un chollo! Claro que para nosotras es agotador y muy duro, pero para ellos es el sueño ideal.

Y dependiendo de la edad que tengan nuestros peques no es raro que se muestren demandantes y muy interesados en mamar. Si a eso le sumamos que nos ven nerviosas, aún van a querer más y más teta. Nos tememos que no hay soluciones mágicas, es posible que si estás sola no más tengas recursos para entretener a tu bebé y disponer de unos minutos de tranquilidad.

Si estás acompañada en esta cuarentena pide ayuda a tu pareja a fin de tener ratos para ti, que te permitan tener un poco de espacio y aire, y poder llevar mejor estos días de encierro.

También, según la edad que tenga, podrías usar alguno de los métodos que usamos en el destete (siempre teniendo claro si quieres o no conseguir un destete).

Hará falta que uses mucha imaginación y tengas ganas de estar inventando cosas todo el rato: acortar la toma y que dure el tiempo en el que escucháis vuestra canción favorita, aplazar la toma proponiendo un plan súper divertido, hacerle esperar unos minutos ( 1 o 2 minutos que se irán dilatando a medida que los vaya aceptando y llevando mejor) …

Casi no duerme, ha empezado a pedir más por la noche

Quizá tu bebé está más tranquilo de día, pero por la noche se muestra más inquieto (quizá está demandante de día y de noche) y pide más el pecho.

El sueño de los bebés cambia a medida que crecen y sabemos que puede cambiar también muy fácilmente como reacción ante las circunstancias de su entorno. Es posible que tu hijo de día se muestre más o menos tranquilo, pero que de noche esté mamando más. No es raro, y es que muchos bebés de noche sacan toda la tensión acumulada del día y por ello puede suceder que de noche ahora mamen mucho más.

Esta experiencia nos está poniendo a todas a prueba y está condicionando absolutamente todos los planes que teníamos. Aunque es posible que el bebé esté ahora más demandante de lo habitual, también es cierto que la lactancia puede ser ahora una gran aliada para calmar al bebé y ayudarnos a pasar mejor esta situación.

En caso de contagio por COVID-19 o incluso de tener síntomas que nos hagan pensar que tenemos el virus, podemos seguir amamantando si es nuestro deseo. Más información sobre el COVID-19 en este enlace. Además, en la app de LactApp hemos habilitado una sección para responder consultas de coronavirus y lactancia.