“Mi bebé mama un rato de manera activa y luego parece que se duerme. Y creo que deja de comer y lo que hace es usarme de chupete. Todo el mundo me dice que no le debo dejar hacerlo y que si ya ha comido, le tengo que sacar la teta de la boca, ¿qué hago? A mí no me duele ni me molesta que lo haga”

Cuando somos madres lactantes una de las frases que más nos dicen es esta porque lo hacen casi todos los bebés: te usa de chupete. Y esto de que nos usen parece que es algo malo y que cuando el bebé realiza este tipo de succión es importante quitarle el pecho ya que parece que no hace nada, o que no hace nada bueno. ¿Pero esto es así? ¿Qué hace un bebé cuando decimos que nos usa de chupete?

En primer lugar, dejar claro que una madre (los pechos) son mucho más que un chupete de silicona, y que por mucho que digan, antes fueron dos tetas que un chupete. 

Dicho esto os vamos a contar por partes qué hace un bebé de menos de tres meses*, que luego la cosa cambia un poco, cuando mama: 

Cuando ofrecemos el pecho al  bebé, empieza a succionar de manera rápida. Es algo así como cuando tocas el timbre de un portero automático con mucha prisa para que abran la puerta. Este tipo de succión desencadena un reflejo de eyección de la leche. La leche que está dentro de la glándula es eyectada hacia el pezón para que el bebé coma. 

1. Una vez se produce este reflejo, que nosotras experimentamos como un cosquilleo,  el bebé cambia la manera de succionar y su succión se vuelve más rítmica y profunda. Es cuando estamos seguras de que come, e incluso si prestamos atención, podemos escuchar cómo traga la leche. 
2. Este ritmo de succión dura unos  3-5 minutos aproximadamente, a medida que come se va relajando y parece que se duerme mamando. 
3.  Cuando empieza esta segunda parte de la toma es cuando todo el mundo empieza a decir la suya: el bebé ya no come, te usa de chupete, es mejor que lo saques, traga aire (nada de esto es así)… y empiezan las dudas sobre qué hacer. Pero sigamos entendiendo qué hace un bebé cuando mama. 
4. El bebé realizará este tipo de succión más lenta, llamada succión no nutritiva, pero cada vez se acepta más la opción de llamarla succión afectiva (de afecto). Mientras la hace, acumula pequeñas cantidades de leche al final de la boca, y cuando por fin la tiene llena, la traga. 
5. Después de un rato más o menos largo de realizar este tipo de succión es probable que se desencadene de nuevo un reflejo de eyección de la leche y el bebé vuelva a comer un buen rato más. 
6. Y de nuevo, después de estar un rato comiendo, cuando la leche ya no salga con tanta rapidez, pasará de  nuevo a succión afectiva. 
7. Después de un rato (al inicio los bebés pueden estar 60 minutos en el mismo pecho) es probable que se sienta satisfecho y se suelte solo. 

Como veis, ambas succiones, la nutritiva y a la afectiva, forman parte de lo mismo, son las caras de la misma moneda. No podemos pensar en que hay una succión correcta y otra incorrecta, ya que ambas son lo mismo con representaciones diferentes por parte del bebé.

El bebé necesita las dos, una para comer y la otra para relajarse. Porque durante la succión afectiva el bebé sigue comiendo. La succión no nutritiva (o afectiva) es un tipo de succión muy importante para el bebé, tiene una función “reguladora” ya que permite al bebé sentirse seguro y tranquilo. 

Si no tienes dolor, si el bebé gana peso de manera óptima no hay razón para negarle este aspecto de la succión como veis tan importante para ellos. 

*A partir de los tres meses los bebés siguen usando el pecho para todo, lo único que el patrón de succión y deglución que hemos descrito no es tan exacto y tiene más variaciones.