Observando se aprende, la primera vez que lo vi
Como la mayoría de niñas, yo jugaba a ser la mamá de todas mis muñecas. En especial, dos de ellas eran mis preferidas, esos bebés realistas que comenzaron a salir a la venta en la década de los ochenta. Todavía veo la caja con los dos muñecos, niño y niña, con una pulserita de identificación, una manta rosa y azul y un biberón. Yo les daba ese biberón, de hecho, daba ese mismo biberón a todas las demás muñecas y…