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¿Estas embarazada? ¿Qué necesitas saber antes de que nazca?

¿Estas embarazada? ¿Qué necesitas saber antes de que nazca?

¿Estas embarazada? ¡Felicidades! Es momento para aprender y prepararte. Si quieres dar el pecho a tu bebé el embarazo es el momento ideal para que plantees dudas y miedos.

Te dejamos aquí unas sugerencias:

¿Hay cosas que puedo hacer estando embarazada para preparar la lactancia?

¡Claro que sí! Durante el embarazo tienes mucho tiempo para preparar la llegada de tu bebé: comprar ropa, buscar la mejor sillita del coche, un portabebés…  y preparar la lactancia.

La lactancia es instintiva para los bebés pero no para las madres, las madres debemos aprender a dar el pecho y, en especial, tenemos que observar cómo se da el pecho.

Quizá pienses que ya habrá tiempo cuando el bebé nazca pero las primeras dudas se producen en las horas y días posteriores al parto. Si estás preparada, tienes buena información y sabés qué debes tener en cuenta, te vas a sentir más segura y vas a poder pedir ayuda cuando surja alguna dificultad.

Puedes hacer muchas cosas:

1. Leer:

Nada mejor que buenas lecturas para tener información y conocimientos. Hay muchos autoras que te va a gustar leer, cada una desde su perspectiva te pueden aportar una visión muy amplia de lo que significa dar el pecho.

2. Observa:

Ya sea en un grupo de apoyo o con una amiga que amamante, no dudes en observar cómo se hace, cómo se debe colocar al bebé y cómo es un agarre correcto.

3. Disipa:

Cualquier duda o miedo que puedas tener deben ser disipados o resueltos antes de que nazca el pequeño. La lactancia materna está llena de mitos y mentiras que sin querer inundan nuestra imaginación: se dice que hay leches de mala calidad, que muchas madres no tienen leche, que hay que tener una dieta muy cuidada, que no puedes tomar medicamentos…

4. Pregunta:

No dudes en averiguar cuáles son los protocolos de lactancia en el hospital en el que vas a dar a luz. Si os van a facilitar el contacto piel con piel de manera precoz, si te van a ayudar y acompañar en la primera toma…

¿Qué necesito saber antes de que nazca?

En las revistas, en el cine, en la publicidad nos venden una maternidad y una lactancia muy de color de rosa. Dar el pecho es algo muy especial y maravilloso, pero debes tener ganas de hacerlo. Cuidar a una persona durante 24 horas es duro, y ser madre tiene mucho de ser un cuidador. Vas a necesitar quien te cuide a ti, quien se preocupe por ti, por tu bienestar y por que tengas el máximo confort.

Así que acepta toda la ayuda que te ofrezcan: ocuparse de la casa, sacar el perro, bajar la basura, fregar los platos, cocinar, lavar, planchar… Porque estar en casa casi todo el día o no trabajar de manera remunerada no significa que tengas ni que puedas hacer todo.

Vas a tener una ocupación principal y muy demandante: cuidar y alimentar a tu hijo. Y si no te ofrecen ayuda no dudes en pedirla, en pedir exactamente lo que necesitas. Seguro que todos tus familiares te van a echar una mano.

La lactancia es muy variable, varía a lo largo de los días, varía en cada niño y cada madre. Así que os va a tocar vivir el día a día de vuestra lactancia, adaptaros a los cambios, a los aumentos de demanda, a las noches de mucha demanda, a dormir poco y amar mucho.

Tengo mucha sensibilidad del pecho, ¿seguirá?

Durante el embarazo el pecho está muy sensible debido a la proliferación de progesterona y estrógenos.

Después del parto, poco a poco, en los días posterior ésta molestia va disminuyendo hasta desaparecer.

Esta molestia, por causas hormonales, se asemeja a un pellizco, cuando el bebé empieza a mamar puedes sentir una sensación desagradable que debería desaparecer en pocos segundos. Si el dolor se mantiene en toda la toma es que algo no marcha del todo bien y debemos buscar una solución cuanto antes.

Amamantar no debe doler. Seguro que has oído mil historias para no dormir y alguna mujer de tu familia o de tu círculo de amigas lo ha pasado mal…

Tenemos interiorizado que todos nuestros ciclos son dolorosos: menstruar duele, parir duele y amamantar duele…

Pero no debería ser así, cuando tenemos dolor el cuerpo indica que algo no va bien, que debemos resolver la situación. Amamantar no debe doler y si te duele busca ayuda lo antes posible no esperes a que el dolor desaparezca por sí solo.

Mis amigas me asustan y otras me dicen que es maravilloso

La lactancia, como cualquier otra cosa de la vida, tiene luces y sombras. Depende de la vivencia que haya tenido cada uno, de lo que haya vivido, sufrido o disfrutado…

Puedes oír vivencias de todo tipo, pero lo que es cierto es que existen momentos, a pesar de que la lactancia fuera mal, que son maravillosos igualmente, pequeños tesoros de amor.

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