Comienzas a sentir pinchazos en el pecho, aparece una mancha roja, sientes dolor cada vez que tu bebé se agarra. Es el momento de ir a urgencias y solventar la situación lo antes posible… 

Pero tú tienes una barrera extra: eres sorda. Y además de asegurarte de encontrar los profesionales adecuados para atender esa mastitis incipiente, también necesitarás que alguien te ayude a comunicar tu malestar y recibir todas las recomendaciones que te den de la manera más fidedigna posible. 

La celebración del Día Internacional de las Personas Sordas es una fecha que Naciones Unidas declaró oficialmente en 2017. Se declaró para reivindicar las lenguas de signos como parte de la diversidad lingüística y cultural de los distintos países, para garantizar su existencia.

Es un buen momento para concienciarnos y reivindicar nuestros derechos, aprovechando mencionar también sobre cómo la falta de sensibilidad y preparación profesional puede limitar el acceso a una atención adecuada para las madres sordas. 

Como sabemos, existe un reconocimiento de los derechos lingüísticos de las personas sordas a aprender, conocer y usar la lengua de signos española/catalana; también se reconoce su valor para garantizar la accesibilidad a la información y a la comunicación de los diferentes bienes, recursos y servicios. 

Este reglamento debe llevarse a la práctica porque no podemos permitir que las necesidades de las personas sordas, y más en concreto las madres sordas, sigan siendo ignoradas. Además existe una ley 17/2010 donde se reconoce oficialmente y garantiza las Lenguas de Signos Española y Catalana, lo cual implica un acceso equitativo a oportunidades y servicios. 

No podemos permitir que las necesidades de las personas sordas, y más en concreto las madres sordas, sigan siendo ignoradas

¿Qué podemos hacer los servicios de salud?

Para lograr un cambio real, los servicios de salud deben adaptarse e implementar estrategias inclusivas, entre las cuales se pueden destacar:

• La incorporación sistemática de intérpretes de lengua de signos en todos los centros de salud.
• La capacitación específica del personal de salud en la cultura sorda y comunicación visual.
• La implementación de herramientas tecnológicas que permitan una comunicación accesible, como vídeos en lengua de signos, subtítulos y otros recursos visuales. 
• La sensibilización de los profesionales sobre la importancia de la equidad en el trato a los pacientes sordos.
• La implementación de proyectos que logren integrar a las personas vulnerables a la vida diaria de las madres sordas o personas sordas.
• Mejorar la calidad de vida y esas barreras que ponen límites a las personas sordas y atentan contra su dignidad.
• Garantizar la igualdad de oportunidades para toda la ciudadanía con el derecho lingüístico de las personas sordas. Lo cual es fundamental para garantizar su plena participación en la información, en la sociedad y los servicios.

Adaptar nuestros servicios de salud para que sean inclusivos y accesibles es una responsabilidad de todos los profesionales. 

En este Día Internacional de las Personas Sordas, invitamos a la reflexión y acción para garantizar que cada mujer, sin importar su capacidad auditiva, reciba el apoyo y la atención de calidad que merece en su camino con la lactancia y la maternidad.