Aunque se va un poco de la temática habitual de este blog, hoy presentamos el proyecto “Érase dos veces“, que es una iniciativa muy especial que nace en el seno de una familia muy creativa y emprendedora, capaz de darle una segunda oportunidad a todos esos cuentos clásicos llenos de violencia y sexismo

Belén y Pablo han tenido la amabilidad de contarnos su proyecto y desde aquí les damos las GRACIAS por su iniciativa. Personalmente hemos participado en su campaña en Verkami, así ya leemos sus cuentos a nuestros hijos y los recomendamos muy fervientemente. Principalmente por la nueva versión del cuento, que mejora infinitamente, pero también por lo cuidados que están todos los detalles: las ilustraciones, la impresión y encuadernación, el lenguaje, los colores, los puntos de libro… está todo trabajado hasta el último detalle y se nota que le han puesto todo el cariño en que saliera bien. Más que bien.

Érase dos veces… contadnos en qué consiste este proyecto

Todos nuestros proyectos personales responden a la etapa vital por la que vamos atravesando.

Érase dos veces se gestó cuando comenzamos a leerle cuentos clásicos a Violeta (nuestra hija mayor). Sin pretenderlo y sin darnos cuenta, le estábamos contando que las mujeres deben esperar a que aparezca un hombre y las salve, que la belleza es un valor esencial en la vida, que lxs niñxs deben ser buenos y obedecer para que no les pase nada malo, que el mundo está lleno de peligros, y que debía ser sumisa y aceptar su destino. Y no compartimos para nada esa visión del mundo y de las mujeres. Pero, a menudo, lo tradicional viene acompañado de atributos positivos, tanto que ni siquiera se plantea la posibilidad de analizarlo, de cuestionarlo y, menos aún, de rechazarlo. Es lo que ocurre con los clásicos; en nuestros recuerdos eran maravillosos, divertidos… pero al releerlos percibes la violencia, el sexismo y la desigualdad. Y son prejuicios y estereotipos con los que no queremos que nuestra hija y nuestro hijo crezcan. Queremos que sean más libres.

Os lo habrán preguntado mil veces pero nos encantaría saber cómo surgió la idea ¿Hubo algún momento o anécdota que os motivó a lanzar el proyecto?

Pues la verdad es que sí. El clic en nuestra cabeza surgió un día que nos prestaron la película de La Cenicienta. Redundando en lo que comentábamos antes, en nuestros recuerdos (sobre todo en los de Belén, ya que era una peli para “chicas”…) era maravillosa. Pero al poco de darle al Play y empezar a verla con ojos de adultos, nos espantó el mensaje: modelos de mujeres sumisas guapas o feas malas, culto a la belleza como valor supremo, mitificación del amor romántico que puede con todo, un príncipe que tiene la potestad de escoger esposa como quien elige un par de zapatos… Un horror. Un horror adornado con un gran lazo rosa, mucha purpurina y nubes de colores… aún más peligroso porque no te das cuenta del mensaje profundo que se transmite.

Le dais una segunda oportunidad a los cuentos… ¿cuál es el cambio principal que le aportáis a estos cuentos clásicos?

Trabajamos en dos vías fundamentalmente: el sexismo y la violencia. Respecto al primero, damos la vuelta a los modelos de mujer. Nuestras protagonistas son mujeres valientes, decididas, libres, que no esperan a ser rescatadas por un príncipe. Toman las riendas de su vida y cuestionan lo establecido. En este sentido, rescatamos por ejemplo, la figura de las brujas. Hacemos justicia histórica y les devolvemos su esencia de mujeres sabias, eso que les arrebataron tan violentamente hace siglos.

También es importante cómo representamos esas mujeres en las ilustraciones. No tienen cuerpos imposibles, cinturas de avispa ni tallas 36. No son guapas, ni feas… son simplemente ellas.

Respecto a la violencia, desterramos toda la violencia que destilan los clásicos… no creemos que un niño que se va a la cama con la imagen de un lobo comiéndose a una dulce abuelita pueda tener felices sueños. Nosotrxs, desde luego, no queremos que nuestrxs hijxs se vayan a dormir con lobos terroríficos, brujas que se comen a las criaturas o cerditos aterrorizados. Lo que no siginifica que sean versiones edulcoradas, el conflicto y la emoción existen pero sin esa violencia sin sentido.

¿Para qué edades recomendáis las lecturas?

Depende mucho de cada niño o niña. Lo ideal es a partir de los 5-6 años. Hay cuentos más infantiles, como Los Tres Cerditos, Caperucita o Hansel y Gretel, y otros con un mensaje más elaborado, como Cenicienta o La Bella y la Bestia. Esos últimos tienen muchos mas matices que un niño o niña más mayor captará mejor.

Hay pa-madres que nos los piden para peques más chiquititos y hacen una lectura acompañada menos elaborada; otros se los regalan a sus hijxs adolescentes e incluso se utilizan mucho para talleres sobre género, violencia, igualdad… para adultos.

¿De cuál de los cuentos estáis más orgullosos?

Ahora mismo los tres últimos nos encantan, será por la novedad ☺ Pero nos sentimos orgullosos de todos. Sobre todo y, a pesar de que pueda sonar exagerado, porque pensamos que cada cuento que llega a una casa es una oportunidad de construir en pro de la igualdad.

Sabemos que hay una princesa en vuestros cuentos que ofrece el pecho a su bebé… ¿nos avanzáis más detalles?

En realidad es la reina ☺. El bebé es Aurora de La Bella Durmiente. Lo planteamos porque nos parece imprescindible normalizar la lactancia materna y qué mejor sitio que en un cuento. Un acto intrínseco a nuestra naturaleza debe mostrarse con naturalidad, no esconderse y que forme parte del imaginario de lxs niñxs. No conocemos ningún libro infantil que muestre a bebés lactando, pero sí muchos tomando el biberón. Está claro que es algo hipócrita y poco valiente.

En la sociedad en la que vivimos resulta más sencillo y menos polémico mostrar imágenes de pechos dirigidas a un adulto (a un hombre, vaya) que exponerlas en su verdadero contexto, como alimento de un niño o una niña.

Con la misma intención, nuestra Sirenita muestra sus pechos libres de conchas.

Y Pinocho es porteado siendo ya mayorcito.

O la familia de Los tres cerditos colecha…

Simplemente, normalización. Y salirse un poquito de la fila, que eso nunca es malo.

Habéis conseguido los fondos a través de la plataforma de crowdfounding Verkami. ¿Cuál es vuestra experiencia? ¿Esperabais que la gente reaccionara tan positivamente a vuestro proyecto?

Llevamos ya tres “Verkamis” a nuestras espaldas y cada vez funcionan mejor. El primero dio mucho vértigo, pero enseguida nos dimos cuenta de que había muchos padres y madres que compartían nuestras mismas inquietudes. Conseguimos movilizar a mucha gente que buscaba algo así, que cada noche hacía sus propias versiones de los clásicos. Y realmente pensamos que este proyecto pertenece a cada una de esas personas que lo han hecho posible.

Poner en marcha una campaña de financiación colectiva es una experiencia muy gratificante. Recuperas la fe en el mundo, en la gente, en que las cosas pueden cambiar. Con cada pequeña aportación la frase de Margaret Mead resuena en nuestras cabezas: “Nunca dudes de la capacidad de un pequeño grupo de personas para cambiar el mundo”.

¿Quién hay detrás de Érase dos veces? ¿A qué os dedicáis actualmente?

Nosotrxs en realidad tenemos un estudio de diseño, Cuatro Tuercas. Combinamos trabajos por encargo con los proyectos personales, como los cuentos o la marca Prepapá. Ahora mismo seguimos con el trabajo habitual del estudio pero siempre maquinando nuevas historias personales.

¿Qué ha significado este proyecto para vuestra familia?

Como decíamos al principio, cada nuevo proyecto nace de un momento vital concreto. Y todos los vivimos muy en familia. Nico y Vio viven todo el proceso, nos ayudan a seleccionar los cuentos, viven con ilusión cada aportación, opinan sobre las ilustraciones, leen los distintos borradores…

Siempre dicen que lxs hijxs te hacen mejor persona y que te dan ganas de construirles un mundo mejor. Y es verdad. Si no hubiéramos tenido hijxs puede que este proyecto no hubiera visto la luz porque nuestros intereses hubieran sido otros.

¿Cómo creéis que podemos las familias construir ese cambio a la igualdad entre niños y niñas, que serán los hombres y mujeres del futuro?

El cambio empieza en la infancia. Nos preocupa mucho la “normalización” con la que se viven ciertas actitudes sexistas o violentas. Se da por supuesto que las cosas son así. El mundo que nos rodea está plagado de juguetes para niñas y juguetes para niños, ropita rosa o azul en función del sexo del bebé, comentarios que asocian a las niñas un comportamiento más de cuidado y a los niños más de lucha…

Como pa-madres podemos hacer muchas cosas en nuestro día a día.

Para empezar, no reproducir roles sexistas en nuestra propia casa. Y eso pasa por trabajar la corresponsabilidad. Si nuestrxs hijxs ven que tanto su madre como su padre se ocupan de sus cuidados, de la casa, de la compra, de llevarles al pediatra… interiorizarán la igualdad como algo natural.

Si ven que utilizamos un lenguaje inclusivo, si no atribuimos etiquetas y roles según el género (la niña cuida y es delicada, el niño lucha y es más fuerte…), si abrimos debates sobre la desigualdad desde su visión infantil (¿por qué crees que los príncipes son siempre los valientes, los que montan a caballo… y las princesas siempre tienen que estar guapas, perfectas y con tacones?)…

Son muchas pequeñas cosas las que podemos hacer para que nuestrxs hijxs se conviertan en adultos igualitarios y corresponsables. Y estamos seguros de que esto es el primer paso para acabar con la violencia contra las mujeres, la física pero también la simbólica.

Creemos que el cambio empieza en uno mismo. Así que, en vez de querer cambiar el mundo, lo que queremos es cambiar nuestro pequeño mundo. Quizá, si muchos individuos se planteasen esa voluntad de cambio en su propia esfera individual, conseguiríamos un cambio a nivel más colectivo.

¿Hay nuevos proyectos a la vista? ¿Nuevos títulos clásicos para renacer?

Esperamos poder hacer tres nuevos para la próxima Navidad y ampliar la colección. Aún no están seleccionados, pero estamos abiertos a sugerencias.

¿Dónde podemos conseguir vuestros libros?

Los libros nos los pueden pedir directamente a nosotrxs en esta dirección de correo electrónico: erasedosveces(arroba)cuatrotuercas.com. Pueden echar un vistazo a precios en http://cuentoserasedosveces.blogspot.com.es. Hacemos envíos nacionales e internacionales.

También los tienen en algunas librerías, pocas pero cada vez nos extendemos más. Y este año contamos con distribuidor en México, y próximamente en Argentina.

Los 9 títulos están en castellano, catalán y euskera. Y los tres últimos también en gallego ¡Nos gusta la diversidad!

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